La flecha disparada por la ballesta precisa de Guillermo Tell parte en dos la manzana que está a punto de caer sobre la
cabeza de Newton. Eva toma una mitad y le ofrece la otra a su consorte para regocijo de la serpiente. Es así como nunca
llega a formularse la ley de la gravedad.
Ana María Shua
viernes, 31 de enero de 2014
Finalmente
Finalmente, nos juntamos luego de chatear por varios meses. Lo primero que pensé fue "Me gusta".
Guillermo Alehandro
Guillermo Alehandro
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